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Tres poetas latinos...

Basilio Belliard, Reinaldo García Ramos y Gabriel Chávez Casazola durante su lectura de poemas.


Ayer tuve la suerte de conocer a tres tipos entrañables gracias a mi participación transversal en el “XV Encuentro de Poetas Hispanoamericanos” haciendo labores de coordinación en uno de sus actos realizado en Béjar... son Basilio Beillard (República Dominicana), Reinaldo García Ramos (Cuba) y Gabriel Chávez Casazola (Bolivia).
Basilio me resultó el menos cercano de los tres a mi gusto poético en lo que fueron versos leídos por él (ya se sabe que no es lo mismo asistir a un recital y escuchar a un poeta por primera vez que leerlo tranquilamente en el sillón de casa... se escapan muchas cosas y el recitado puede hacer que los versos crezcan o se agoten), pero tuve la suerte de que me regalase un librito suyo de relatos breves –“Oficio de arena”– que me dejó fascinado por razones diversas que pienso explicar en una entrada aparte, pues lo merece.
Reinaldo García demostró enseguida ser un poeta hecho, serio y muy formado. Su poesía me pareció excelente y perfectamente trabada, llena de contenido y con un ritmo que se acrecentaba con su hermoso acento cubano. Es un tipo al que tengo que leer con tranquilidad, pues su muestra poética leída me pareció muy interesante.
Gabriel Chávez Casazola fue, sin lugar a dudas, el más brillante de los tres, ofreciéndonos una poesía inteligente, original, llena de imágenes coloristas y de sorpresas bellísimas mezcladas con un delicado humor muy de mi agrado (le abracé fuerte al terminar porque me emocionó). Me regaló su libro “El agua iluminada” (una rara edición trilingüe con vuelcos al portugués y al italiano)... y lo leí de un tirón a media noche, y me gustó aún más, hasta el punto de que terminé leyendo tres veces su poema “La noche americana”, un poema narrativo en tono de cine que me ha acercado mucho a este tipo boliviano que vive en Santa Cruz. Una pasada.

Lo pasé lindo.


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